Querido Dominique García:
Como Camus, eres un niño del Mediterráneo.
Como aquel que solía decir que «la realidad viva que es el Mediterráneo no es algo nuevo para nosotros», «que cada vez que una doctrina ha encontrado la cuenca mediterránea, en el choque de ideas que ha resultado, es siempre la que ha permanecido intacta»[1], habéis comenzado a explicar el presente a través de los vestigios de su pasado.
Este «genio mediterráneo», por decirlo de nuevo como Camus, nacido del encuentro único de la historia y de la geografía, habéis dedicado vuestra carrera a revelar sus orígenes.
Siguiendo los pasos de otro niño del país, Camille Jullian, que ha renovado considerablemente la historia antigua, habéis consagrado vuestros trabajos, en el laboratorio de investigación que lleva su nombre, a sacudir una serie de ideas recibidas sobre los orígenes del perímetro mediterráneo. A la inversa de las numerosas hipótesis que hacen de la Galia mediterránea un espacio celta secundario, se zanja el debate sobre las poblaciones indígenas - Ligures o celtas. Así demuestra que la «Celta mediterránea», para retomar el título de una de sus obras, toma su nombre de la llegada de los exploradores-comerciantes griegos a partir de la segunda mitad del siglo VII a.C., que nombraron «Ligures» las poblaciones del Mediterráneo noroccidental y «Celta» el espacio donde llegaron ². Y recordáis por ello que la etnicidad es un fenómeno social estrechamente asociado a una construcción cultural y una dinámica económica.
Investigador reconocido en una disciplina que usted contribuye a imponer en el campo universitario francés, también se preocupa por garantizar su transmisión y difusión entre el mayor número posible de personas.
Profesor en la Universidad Paul Valéry de Montpellier, Profesor y luego Profesor en la Universidad de Provenza, Aix-Marsella, comparte su pasión y su experiencia con generaciones de estudiantes cuya vocación alienta y acompaña.
Armador que eleva los valores de su disciplina, usted es una de las grandes figuras de la arqueología cuya excelencia y diversidad encarna ya que sus trabajos están en la encrucijada de la geografía, de la historia y de la arqueología.
Habéis contribuido a imponer esta disciplina al servicio de la ciencia y del interés general en el campo institucional francés. Y usted se esfuerza por mejorar de forma duradera las condiciones de ejercicio y el alcance científico al frente del Centro Camille Jullian de 2008 a 2011 y después a la Vicepresidencia del Centro Nacional de Investigación Arqueológica (CNRA) desde 2012.
Más que una disciplina cuya carrera encarna la excelencia, es una profesión, un oficio del que usted es el portavoz y el defensor. Antes incluso de emprender el notable recorrido universitario que se le conoce, usted es arqueólogo contractual, en relación directa con la búsqueda de terreno en la Escuela de Lattes, en particular, de la que dirige la obra.
Por tanto, gracias a su autoridad intelectual y a su experiencia profesional en este ámbito, y dotado de un verdadero sentido del servicio público, usted ha presidido una comisión encargada de la evaluación científica, económico y social del dispositivo de arqueología preventiva que le he confiado.
Usted me ha presentado un diagnóstico preciso e informado en forma de libro blanco para definir mejor el lugar y el papel de la arqueología preventiva, en lo que se refiere a la programación y a la definición de las orientaciones de la investigación, sino también del seguimiento y del control del estudio del patrimonio arqueológico y de su valorización.
Esta contribución nos ha permitido alimentar la vertiente arqueológica del proyecto de ley patrimonio para una mejor consideración de los retos patrimoniales de hoy y de mañana.
Querido Dominique García, es el investigador, el contrabandista y el defensor de una disciplina en el centro de los desafíos científicos y técnicos del patrimonio y del urbanismo, que hoy distinguimos. Un arqueólogo al servicio del conocimiento y del interés general para restituir, explicitar y transmitir los vestigios materiales de la existencia de la humanidad. A través de vosotros, la República honra una disciplina y una profesión. Y rinde homenaje a toda la comunidad arqueológica.
Querido Dominique García, en nombre del Presidente de la República y en virtud de los poderes que nos han sido conferidos, le nombramos Caballero de la Legión de Honor.
[1] Camus, «La cultura indígena - La nueva cultura mediterránea»,
Conferencia inaugural de la Casa de la Cultura, 8 de febrero de 1937
² «Celta» del griego Kellein, abordar.